El acuerdo comercial con la Unión Europea (UE), que entró en vigencia en marzo de 2013, fue un paso fundamental hacia el acercamiento con dicho bloque económico. De hecho, de acuerdo con el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), nos ha permitido obtener un acceso preferencial con arancel cero para el 100% de nuestras mercancías no agrícolas y para el 89.8% de las agrícolas. Productos como los espárragos, las paltas, el café y las alcachofas ingresan hoy al mercado europeo libres de aranceles.

A pesar de dichos incentivos, la lenta recuperación del bloque tras la crisis griega que afectó severamente la eurozona en 2011, la desaceleración económica mundial vivida entre 2014 y 2015, y la caída en el precio del cobre en dichos años, afectaron fuertemente nuestro intercambio con la UE. No obstante, todo parece indicar que el rumbo ha comenzado a cambiar.

La UE representa un mercado de más de 500 millones de consumidores, y se ha consolidado, hacia noviembre de 2016, como nuestro tercer destino de exportación, solo por debajo de China y EE.UU. Así, para esa fecha, las exportaciones a dicho mercado sumaron US$ 5,027 millones, con un crecimiento del 0.1% respecto al mismo periodo de 2015. Aunque baja, esta representa la primera variación positiva en nuestras exportaciones hacia la UE desde 2011, año en que crecieron un 32% respecto a enero-noviembre de 2010.

Cabe destacar que las exportaciones no tradicionales hacia el mercado europeo han tomado un papel cada vez más importante, pues representan, a la fecha, un 47% (US$ 2,341 millones) del monto total exportado, en comparación con el 42% (US$ 713 millones) que constituían para el mismo periodo de 2015, y el 23% antes de la entrada en vigencia del acuerdo. A todas luces, una gran ganancia para este sector.

Con respecto a los productos del sector no tradicional enviados a la UE, entre los principales se encuentran los del sector agropecuario: las paltas (US$ 339 millones, +68.9%), el cacao en grano (US$ 125 millones, -12.9%), los espárragos (US$ 115 millones, +3.8%) y las uvas (US$ 95 millones, -20.9%). Todos ellos ingresan con arancel cero gracias al acuerdo comercial. Destaca en este aspecto los casos de las uvas, que pagaban tasas de hasta por encima del 17%, y los arándanos, con tasas cercanas al 10%. En cuanto a estos últimos, incluso, se incrementaron sus envíos de US$ 5 millones a US$ 80 millones con la entrada en vigencia del acuerdo. También destacan los envíos de quinua, que alcanzaron los US$ 40 millones hacia noviembre de 2016, un crecimiento de 1,083% respecto al mismo periodo de 2012, cuando ingresaban con un arancel promedio del 17.1%.

Al analizar las exportaciones por sectores, se registra un incremento en el valor exportado principalmente del agropecuario (US$ 1,553 millones, +15.9%) y del químico (US$ 166 millones, +28%).

Por otro lado, entre los principales productos del sector tradicional enviados de enero a noviembre de 2016 se encuentran los minerales de cobre y sus concentrados (US$ 672 millones, -31.4%), los demás cafés sin descafeinar (US$ 359 millones, +16.1%) y los minerales de zinc y sus concentrados (US$ 309 millones, +41.1%). Así, mientras el sector minero registró una caída del 12.9% respecto al mismo periodo del año anterior, producto de los bajos precios del cobre, repuntaron los envíos de los sectores agrícola (US$ 379 millones, +18.5%) y de petróleo y derivados (US$ 277 millones, +7.4%), aunque no pudieron revertir la tendencia decreciente que se registra desde 2011 en el sector tradicional.

Nuestros principales socios comerciales dentro de la UE son España, que representó un 22% de las exportaciones a esa región hacia noviembre de 2016 (US$ 1,084 millones, +7.9%); Países Bajos, con un 19% (US$ 949 millones, +19.2%); Alemania, con un 16% (US$ 808 millones, -5.3%); Bélgica, con un 11% (US$ 567 millones, +37%), y Reino Unido, con un 11% (US$ 546 millones, -1.7%). Por el contrario, Luxemburgo, Croacia, Letonia, Chipre, Malta, Eslovenia y Hungría son los países a quienes menos exportamos (menos de US$ 1 millón), por lo que constituyen potenciales mercados por explorar.

Nuestras importaciones de la UE, por su parte, alcanzaron un total de US$ 4,175 millones entre enero y noviembre de 2016 (+0.8%). De ellas, un 51% fueron bienes de capital; un 31% bienes intermedios y un 18% bienes de consumo. Cabe destacar que el 66% del total de nuestras importaciones en este periodo se destinó a la industria peruana, un 11% a transporte y construcción, y un 3% a la agricultura. Además, Alemania fue nuestro principal proveedor (US$ 1,177 millones; +13.8%), seguido por Italia (US$ 671; +14.3%) y España (US$ 607 millones; -7.6%). Nuestros principales productos importados de la UE fueron las demás turbinas de gas de potencia superior a 5,000 kW, (cuyas compras se quintuplicaron desde la entrada en vigencia del acuerdo), los vehículos de cilindrada entre 1,500 cm³ y 3,000 cm³, y los medicamentos para uso humano.

Como se puede notar, el acuerdo comercial con la UE ha beneficiado principalmente al sector exportador no tradicional que, según cifras de la Sunat, viene presentando un incremento ininterrumpido en el volumen exportado desde 2012. El sector tradicional, en cambio, se ha visto severamente perjudicado por las caídas en los precios de los commodities y la lenta recuperación de la economía mundial, que esperamos pueda comenzar a revertirse este 2017. Asimismo, hay muchos mercados dentro de la propia UE que aún no han sido explorados y podrían significar potenciales socios para nuestro país. ¡Vamos tras ellos!