¿Esto no es lo que estabas buscando?
Vuelve a definir los parámetros de tu búsqueda.
TELETRABAJO COMO ALIVIO AL CONGESTIONAMIENTO
Por ComexPerú / Publicado en Julio 24, 2020 / Semanario 1035 - Economía
![](https://www.comexperu.org.pe/upload/images/economia-240720-041509.jpg)
La pandemia no solo ha puesto al descubierto las enormes deficiencias del sistema de salud peruano, sino que también lo ha hecho con otros sectores como el de transporte. Nuestro sistema de transporte urbano en el contexto previo a la COVID-19 sufría problemas como la congestión vehicular, la falta de integración de los distintos modos de movilización, la informalidad, una infraestructura inadecuada, entre otros. Estas variables, aunadas a la pérdida de tiempo que representaba moverse en la capital, reducían la productividad y, con ello, la competitividad de muchos trabajadores. De acuerdo con el TomTom Traffic Index 2019, el tiempo promedio anual que perdían los conductores en el tráfico limeño ascendió a 209 horas, es decir, ocho días con 17 horas al año, un valor que nos posicionó como una de las diez ciudades con peor congestionamiento vehicular.
Como era de esperase, producto del distanciamiento y la inmovilización social implementados para evitar la propagación del coronavirus, los ingresos del sector de transporte urbano se han visto gravemente perjudicados. Frente a esto, a través del Decreto de Urgencia 079-2020, hace unas semanas se aprobó el otorgamiento de un subsidio económico a las empresas de transporte que continúen operando durante el estado de emergencia y cumplan los protocolos de seguridad establecidos por el Ministerio de Salud. Si bien esta medida resulta necesaria para garantizar la sostenibilidad de las empresas transportistas, se espera que este apoyo sea temporal y que sirva como una oportunidad para ordenar el sector. Sin embargo, aunque se realicen estos esfuerzos por parte del sector formal, aún queda un gran trabajo por resolver en cuanto al transporte informal.
Existe, pues, un gran número de transportistas que realizan un servicio colectivo que, si bien responde a una necesidad insatisfecha del transporte público, no justifica el impacto negativo que genera para la sociedad. Frente a esto, y dada la limitada oferta de transporte público que padecemos, resulta importante rescatar y promover aquellas medidas eficientes alternativas al transporte urbano como son las plataformas digitales (Aplicativos de transporte). Entre ellas, Uber, Beat y Cabify, que han demostrado su compromiso para atender a las personas que necesitaban trasladarse desde el inicio de la cuarentena.
Estos aplicativos, gracias a la provisión de un servicio eficaz, seguro y con el adecuado cumplimiento de los protocolos brindado por las autoridades, han resultado ser los grandes aliados al transporte citadino. Así, este servicio evitaría que la demanda insatisfecha se traslade a los sistemas ya saturados de trasporte público masivo, disminuyendo los posibles riesgos de contagio. Además, es preciso mencionar que, debido a su flexibilidad, estas plataformas sirven como una fuente de ingreso alternativa para miles de ciudadanos frente a la difícil situación económica que vivimos.
TELETRABAJO: UN ALIVIO AL CONGESTIONAMIENTO
Las medidas de confinamiento y suspensión de actividades diarias fuera del hogar han provocado una enorme reducción del congestionamiento vehicular en la capital. Así, por ejemplo, mientras que en la semana 11 (previa a la declaración del estado de emergencia) este era del 38%, entre las semanas 21 y 22 llegó al 1%, una reducción en los cuellos de botella vehiculares que fue más que notoria.
De acuerdo con una encuesta sobre los efectos de la COVID-19 en la movilidad de Lima y Callao, realizada por el observatorio ciudadano Lima Cómo Vamos y Despierta Lima, un 31.1% de personas comentó que utilizará bicicleta y scooter luego de la cuarentena, un 22.1% usará auto particular, mientras que un 18.5% afirmó que trabajará o estudiará desde casa. Este último valor resulta relevante si consideramos que esta opción no existía en el periodo previo a la pandemia. He aquí la importancia del teletrabajo como una posible alternativa para la reducción del tráfico en la ciudad. Esta modalidad de trabajo, que antes se veía como un simple beneficio adicional, ahora es una necesidad.
En esa línea, una publicación del Banco de Desarrollo Asiático sostiene que el teletrabajo es una estrategia de gestión de la demanda de transporte, una de las varias opciones que se tienen para redistribuirla en el espacio y en el tiempo. De esta manera, fomentarlo reduciría el número de viajeros en las carreteras durante las horas pico, con lo que se aliviaría el estrés del transporte público e incrementaría la productividad de muchos trabajadores. En tanto, si nos adelantamos a un escenario pospandemia, es evidente que el home office, como una opción de trabajo, puede incidir en la reducción del tráfico en el trasporte público. Asimismo, los efectos subyacentes de esta medida pueden aliviar a muchas personas a enfrentar los costos de esta crisis.
Cabe destacar que la principal preocupación ahora no solo es el tiempo destinado al viaje hacia el centro de trabajo, sino el riesgo al que muchas personas se enfrentan debido a las altas tasas de contagio en el transporte público. Por tanto, la gestión del transporte urbano necesitará, además del adecuado trabajo de la autoridad competente, una orientación de las autoridades sanitarias, así como el liderazgo y priorización por parte del Gobierno y el sector privado.
ARTÍCULOS RECOMENDADOS
- Comercio Exterior
- Economía
- Actualidad
- Gobierno
¿EL COMERCIO INTERNACIONAL ESTÁ EN RIESGO?
Los recientes anuncios relacionados con políticas arancelarias en EE. UU. podrían generar un impacto económico considerable en América Latina, según estimaciones de Moody’s Analytics. Las medidas no solo ralentizarían el crecimiento de las exportaciones e importaciones de la región y el mundo, sino que también contribuirían a una mayor presión inflacionaria. El riesgo de una guerra comercial prolongada amenaza con debilitar aún más la estabilidad económica de la región.
- Empleo
- Economía
- Competitividad
PERUANOS QUE EMIGRAN: ¿NUEVO MÁXIMO HISTÓRICO?
La falta de confianza en el desempeño económico y social del país motiva a más peruanos a buscar oportunidades en el extranjero. Hasta la primera mitad de 2024, se registraron más de 184,000 compatriotas que partieron en 2023 y acumularon al menos un año sin volver al Perú, según recientes estimaciones del INEI.